Esta
madrileña de 26 años, Carlota García de Madariaga,
lo tuvo ya claro a los nueve cuando le dijo a su padre que prefería
acudir a clases de canto en vez de ir los sábados con él a aprender
golf. Esa pasión por la música, le ha llevado a componer canciones
que hablan de vivencias personales, sensaciones o sentimientos, porque no
concibe crear si no lo ha vivido.
Estar sola en su nueva casa, durante el confinamiento, le permitió
indagar en todos sus pensamientos e inseguridades, y abrirse sin tapujos.
De ahí surge el ep que acaba de publicar, Manual de Autoayuda.
Vol. 1, y que -asegura- le ha supuesto emprender un proceso muy terapéutico
y sanador.
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Ahora la gente se atreve a hablar de determinadas cosas que antes eran tabú,
como el ir al psicólogo o cuidar la salud mental. Antes no se podía
porque te señalaba. Gracias a que ahora hay más facilidad, los
autores tenemos más libertad a tratar esos temas tan intensos, profundos
y personales, de abrirnos. Aunque para mí hablar de esos monstruos
e inseguridades que llevaba a mis espaldas me ha supuesto un proceso largo
y tedioso".
· "Enrique Urquijo es un autor, un cantautor, y al final grandes
cantautores me han definido y me han ayudado a estar donde estoy. Escuchar
a autores como él, que son míticos del panorama español,
y de grupos tan conocidos como Los Secretos, también influye".
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· "Aunque no me gusta encasillarme, mi música estaría englobada dentro del pop porque es el género que mejor la define. Y el denominador común del pop es el de canciones que conectan, que son pegadizas, que te remueven con sus letras y, aunque no necesariamente, te agitan, ya sea para bailar o hacerte pensar".
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"Mis referencias a la hora de componer son muy amplias pero hay artistas
que me inspiran mucho a día de hoy por la voz increíble que
tienen y porque son autoras de sus canciones, como Julieta Venegas, Taylor
Swift, Julia Michaels, Gracie Abrams... (...) Dentro de los clásicos,
Queen, Muse, Fleetwood Mac, Steve Wonder, Michael Jackson... ".
· "La magia de una canción está en poder conectar
con uno aunque no esté viviendo eso pero que le recuerde algo que ha
vivido. La que permite conectar con una etapa de la vida que haya marcado,
que uno lleva tatuada en la piel, y le hace ser quien eres hoy. Eso deben
ser las canciones, atemporales, que te pueden servir para curar heridas de
ese momento o recordar aquellas que ya has curado".
