Grupo musical Atolladero

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Este trío sabe salir airoso con unas canciones que no se quedan en el punk del sota-caballo-rey. Alba (voz y bajo), Cliff (guit y voz) y Paco (batería) buscan darle sonoridades distintivas a sus temas, se defienden bien instrumentalmente y sus letras -que empatizan con los inadaptados sociales- no son improvisaciones. Hay desesperanza o temor (Me observo desde arriba y no parece que esté viva / Me empiezo a arrugar, el pus brota sin parar / Ya estoy en el ataúd con velo negro y piel azul) y también ironía o surrealismo de serie b (Me llamo Ash y trabajo en un S-mart / Estoy algo empanado, porque aún no he madurado / Hace un año que maté a mis amigos / Porque estaban un poquito poseídos). En 2022 editan su primer Lp con ese punk que puede ir desde el clásico melódico hasta el envuelto en ropajes western -¿por su cercanía a zonas desérticas?-, pasando por uno pelín más rockero. Tienen algunas canciones en inglés que pasan el análisis, pero atraen más las cantadas en castellano. © LCdP 2024 24-01-2024