No es de extrañar que su inclimación por un pop dulce, unas estructuras musicales sencillas y una cierta querencia por los sonidos acústicos hiciera que el camino de esta banda vasca se cruzara con el de los componentes de Duncan Dhu, Vasallo y Erentxun, quienes les produjeron, respectivamente, su primer y su último disco; aparte de colaborar también con letras o cantando (como es el caso de Mikel en La puerta del jardín). Carlos Escribano (voz y guit), José Karratxo (batería) y J. A. Jiménez (bajo) lo dejarían entrada ya la década de los noventa. © LCdP 2012